Sí se puede condena el asesinato de una mujer en Tenerife, víctima de violencia machista

La organización ecosocialista considera imprescindible el compromiso de las administraciones públicas y del conjunto de los agentes sociales para erradicar el sexismo y su manifestación más extrema

Sí se puede condena el asesinato de una mujer de 27 años en Arona (Tenerife) por violencia machista, que se suma a las 68 víctimas por este fenómeno en 2017, la tercera en Canarias. La organización ecosocialista reitera que “la violencia contra las mujeres es un problema central a la hora de construir una sociedad más democrática, justa e igualitaria y requiere un permanente compromiso de las administraciones públicas y del conjunto de agentes sociales para acabar con el sexismo y su manifestación más extrema: la violencia hacia las mujeres”, asegura la portavoz del Área de Feminismos y LGTBI de Sí se puede, Marta Jiménez.

La organización invita a la ciudadanía de la Isla a participar en los actos de repulsa, convocados por el Foro Contra la Violencia de Género de Tenerife, que organiza una concentración para este jueves, 2 de noviembre, a las 19.00 horas, en la plaza de la Candelaria (o plaza del 15M) de la capital tinerfeña; por la Red Feminista de Gran Canaria, con cita este jueves en el Paseo de Triana, frente al parque de San Telmo a las 19.30 en la capital grancanaria, y por el Foro Contra la Violencia de Género de Lanzarote, también este jueves a las 12.00 horas frente al Ayuntamiento de Arrecife.

“Sigue siendo insuficiente el esfuerzo que se realiza para la sensibilización de todo el conjunto de la sociedad, para que se considere que la violencia machista nos afecta a todas las personas”, manifiesta Jiménez. Por este motivo, Sí se puede anima a “amplificar en este acto el rechazo ante las violencias machistas al grito de “Ni una menos”, como expresión de la toma de conciencia sobre sus nefastos efectos y para exigir acciones coherentes a las administraciones públicas”, añade.

Este asesinato, que afecta a una mujer joven, pone en evidencia la necesidad de desplegar con decisión políticas públicas que afronten la labor de prevención, frente la política de gestos que se mantiene en la actualidad mayoritariamente. “Es imprescindible contemplar la detección precoz de la violencia machista entre la juventud canaria, una labor que se debe afrontar desde el sistema educativo, pero también desde distintas instituciones que puedan acceder a una juventud que ha crecido, en la última década, sin recibir ningún tipo de educación afectivo-sexual”, subraya la portavoz.

A juicio de Sí se puede, los ayuntamientos deben contar también con un plan sistemático de prevención. “Los planes de igualdad asentados en la realidad local constituyen un instrumento imprescindible para enfrentar esta tragedia colectiva”, apunta Jiménez. Además, “es necesario contar también con medios judiciales, policiales y asistenciales para la atención integral a las mujeres y sus descendientes, y para desarrollar instrumentos y recursos para su acompañamiento permanente”.

Igualmente, es preciso impulsar avances legislativos y mejoras en los protocolos de actuación y coordinación de los distintos poderes públicos, que deben contar con la dotación presupuestaria y cuantos recursos humanos y materiales sean precisos para una aplicación real. En este sentido, el acuerdo alcanzado sobre esta materia en el parlamento español –el Pacto de estado contra la violencia de género–, aunque es insuficiente, puede suponer un marco positivo para afrontar mejoras en la gestión de las políticas públicas en esta materia, además de requerir con “extrema urgencia que su financiación no se vea afectada por la parálisis presupuestaria que el gobierno del PP va a imponer para el año 2018 por su incapacidad para la negociación política”.

Canarias enfrenta en estos casos un problema permanente, con “un modelo de financiación del Sistema Social de Prevención y Protección Integral de las Víctimas de Violencia de Género circunscrito incomprensiblemente a convenios anuales que impiden la consolidación de los servicios que se prestan en las islas y municipios”, denuncia la portavoz. Esta inestabilidad en el marco institucional “dificulta afrontar estrategias que impulsen la implicación de toda la sociedad para desarrollar instrumentos y recursos que favorezcan nuevas medidas imprescindibles”, como el acompañamiento permanente de las víctimas en su proceso de reorganizar sus vidas y liberarse de la mala experiencia del maltrato y la violencia por ser mujeres.

A lo largo de 2017 se ha producido un incremento inaceptable de las víctimas asesinadas por violencia de género, mientras que los indicadores oficiales evidencian que el problema no retrocede en Canarias. Sí se puede considera “preocupante” el hecho de que en 2016 se produjera un incremento de las llamadas –más de 14.000 ese año– al 112, que recibió una media de 39 llamadas diarias por alertas. También “resulta crítico que Canarias siga siendo la segunda comunidad autónoma con mayor número de denuncias por habitante –en 2016, 81 denuncias por cada 10.000 habitantes– y que haya generado 5.677 sentencias de culpabilidad por violencia de género”.

Los comentarios están cerrados.