Manifiesto de Sí se puede 8 de marzo: Día de lucha de las mujeres

La aplicación de unas duras políticas de recortes de derechos y de recursos por parte de los partidos tradicionales ha provocado un aumento de la precarizacion laboral y un incremento de la brecha salarial existente entre hombres y mujeres,  que llega ya a un 28%. En el último año el desempleo ha atacado con especial virulencia a las mujeres, que han sufrido más despidos y la consolidación de empleos ya de partida muy precarios y peor retribuidos.

Los recortes y la falta de ayudas a la dependencia está provocando que cada vez más y más mujeres deban abandonar su vida laboral para ocuparse de unas tareas sociales que el Estado y las Comunidades Autónomas ignoran. La conciliación entre la vida laboral, personal y familiar continúa siendo también una asignatura pendiente. Los hombres siguen sin compartir equitativamente las cargas familiares y las tareas domésticas. Los retrocesos en igualdad han hecho que el Estado español pase del puesto 22 al 67 en el Índice de Desarrollo de Género de Naciones Unidas, dejando bien claro el escaso interés real que existe por avanzar en este sentido.

En este 2013 debemos seguir trabajando para atacar estos principios patriarcales, arraigados en la mentalidad de muchos de los dirigentes políticos y empresariales que siguen creyendo en el papel subsidiario de las mujeres en nuestra sociedad. Estas corrientes conservadoras, auspiciadas por la Conferencia Episcopal, tratan de devolver a las mujeres a las tareas del hogar, acabar con el derecho a decidir sobre la interrupción voluntaria del embarazo o con los recursos existentes para combatir la violencia machista, que es cuestionada y trata de convertirse en un mero problema intrafamiliar cuando en realidad se trata de un drama social que debe afrontarse colectivamente.

Desde Sí se puede apostamos por la lucha para conquistar los derechos que nos corresponden como mujeres, para acabar con la brecha laboral y lograr empleos estables y de calidad. También nos toca como mujeres estar en la primera línea del rechazo a los recortes en educación, sanidad, servicios sociales, dependencia, políticas de igualdad y en el todo el conjunto de partidas sociales, al ser las principales afectadas por tales rebajas.

Para avanzar en la igualdad no es sólo necesario leyes que regulen, sino también, y mucho más importante, crear una conciencia social que transforme la cultura patriarcal y sexista que aún existe. Por ello debemos lograr una educación que fomente estos valores, frente al modelo conservador que pretende establecerse con las nuevas reformas educativas.

Finalmente queremos aprovechar este 8 de marzo para reclamar que se garantice la aplicación de la Ley Estatal de Igualdad y de la Ley Canaria de Igualdad, poniendo en práctica planes de igualdad en las administraciones y en las empresas, trabajando activamente para acabar con la feminización de la pobreza y con todo tipo de violencia contra las mujeres.

Creemos que avanzar en igualdad es avanzar en derechos, mejorar como sociedad. Mantener abierta la brecha entre hombres y mujeres, discriminando a la mitad de la ciudadanía por su género, nos debilita como sociedad y limita nuestras posibilidades reales de desarrollo. Este 2013 debe servir para seguir en ese camino, el único que debemos recorrer para acabar con la discriminación, los estereotipos y la violencia.

¡Sigamos avanzando en la igualdad!

¡Nada sin las mujeres!