El edil de Sí se puede en La Laguna, Juan Miguel Mena, critica el espectáculo vivido en el Pleno municipal de este jueves, en el que considera que el alcalde accidental, Javier Abreu, protagonizó “algunos de los momentos más lamentables del actual mandato”, con sus constantes interrupciones a los ediles en el uso de su palabra y por sus referencias desafortunadas a la ciudadanía que ocupaba buena parte del salón de plenos y la sala adjunta.
Mena cree que Javier Abreu mostró escasa capacidad de diálogo, especialmente al impedir la intervención de un vecino que había traído al pleno el comprobante de las 102 firmas que había presentado en tiempo y forma. “Este hecho, sumado a la forma en la que se impidió expresar la posición de mi organización con respecto a lo que se estaba viviendo en el salón de plenos provocaron que abandonara la sesión”, explica.
El concejal lamenta haber tomado esta decisión, “me pudo la indignación y siento no haber tenido más estómago para que dos mociones nacidas del movimiento ciudadano pudiesen ser debatidas en el Pleno”. A pesar de ello Mena asegura que volverá a llevar estas cuestiones a la próxima sesión, incluso cuando “se hizo más que evidente que la voluntad de CC-PSOE es la de seguir pasando el rodillo por encima de los deseos de las plataformas vecinales”.
Vecinos “díscolos”
Juan Miguel Mena cree que en este Pleno se ha evidenciado el papel que quiere jugar el grupo de Gobierno estableciendo la “ley marcial con los vecinos y vecinas díscolos”. Asegura que a pesar de la insistencia de Javier Abreu, “los que me conocen saben que jamás participaría en un acuerdo que limite la libertad de expresión o que sirva de amenaza a los participantes en los plenos cuando el mensaje que lanzan sea duro contra el equipo de Gobierno”. El concejal admite que “una vez más quieren vender como un acuerdo lo expresado exclusivamente por Fernando Clavijo en una reunión de la junta de portavoces anterior al pleno de septiembre, motivo que nos llevará a debatir en nuestra asamblea sobre si vamos a seguir participando de las mismas, mientras no se establezcan actas oficiales de las mismas, ya que actualmente son una simple herramienta de control del Gobierno a la oposición”.
Mena insiste que, en coherencia con su trayectoria vital, “no permito ni permitiré que el pleno se utilice para acallar o vetar a los vecinos y vecinas, más aún cuando en este momento los díscolos con la mayoría se encuentran sentados en el lado institucional del salón de plenos”. Afirma que “las imágenes de los policías desalojando a los vecinos son más lamentables que unas palabras duras”.
Insiste en que “lo único que hizo el alcalde en el pleno de septiembre es leer una especie de comunicado que no se nos entregó hasta el inicio de la sesión plenaria, inmediatamente pedimos una reunión de portavoces, en el que le mostramos nuestro desacuerdo con lo que se decía, al igual que la concejala Candelaria Marrero, reunión donde no estaban los representantes de SxTF. A pesar de eso el acuerdo se leyó, como un acuerdo unánime del Pleno, y sobre todo se entregó a los medios, que es lo que tememos que pretendía asegurar el señor alcalde”.
Finalizan señalando que en el Pleno de ayer al menos los defensores de la propuesta de Fernando Clavijo quedaron retratados en su enmienda a la moción de SxTF, en la que ratificaron con sus votos la voluntad de impedir las voces críticas con el Gobierno en los plenos municipales.