El Área de Movilidad Sostenible del Ayuntamiento de La Laguna, que dirige Rubens Ascanio, está trabajando en la sustitución de casi la mitad de la flota de la red urbana de transporte público por seis nuevas guaguas eléctricas y totalmente accesibles, una intervención que supondrá una inversión de más de 3 millones de euros durante este año y el 2024 y que ya se está comprobando con recorridos presenciales por algunas rutas seleccionadas para poder, así, comprobar sus prestaciones técnicas y su adaptación a las necesidades y demandas transmitidas por población de todos los distritos en el reciente estudio de guaguas municipal.
Tras el uso de un modelo de mayor tamaño en la 219 (que recorre los barrios de Las Chumberas, Los Majuelos, el Cardonal, Taco y San Matías), esta semana, el equipo del Área y representantes de la empresa Titsa, tanto personal técnico como ejecutivo, han estado probando un nuevo micro eléctrico y accesible en los recorridos de las líneas 271 (que enlaza el Intercambiador de La Laguna con el monte de Las Mercedes) y la 206 (ruta circular desde el Intercambiador y que pasa por la rotonda del Camino Real de La Verdellada, la antigua estación de guaguas, Juana La Blanca, calles 6 de Diciembre y El Juego y la avenida de La Trinidad), ambas vinculadas con las Zonas de Bajas Emisiones propuestas por el municipio.
Estos recorridos, explica Rubens Ascanio, nos permiten “ver la maniobrabilidad de la guagua y si sus prestaciones técnicas cumplen con las necesidades que nos han transmitido la población y las asociaciones de vecinos antes de iniciar el proceso de adquisición”. El edil recuerda que, durante estos últimos años, el Área ha impulsado un estudio completo sobre las actuaciones necesarias en la red de transporte urbano para renovar y reforzar el servicio, dando respuesta a las demandas de la población y avanzando hacia un modelo más inclusivo y responsable con el medio ambiente.
“Estamos trabajando en la aplicación de numerosas medidas para incentivar el uso de modelos de transporte más sostenibles y saludables, y esto incluye una intervención completa en nuestro ámbito competencial, el del transporte público urbano, que hemos diseñado conjuntamente con la ciudadanía y que, además de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, nos va a permitir ampliar los recursos adaptados a las necesidades de personas con movilidad reducida en diferentes puntos del municipio en los que existe una especial demanda, como Jardina o el Camino de Las Mercedes”, destaca Ascanio.
En este sentido, el concejal valora que “queremos garantizar la seguridad y comodidad desde que se accede al servicio, mejorando la red urbana, modernizando los vehículos, introduciendo sistemas más sostenibles y actualizando las paradas y las líneas a las necesidades reales del conjunto de la población del municipio. El objetivo es que el transporte público sea lo suficientemente atractivo para desincentivar formas de transporte que son insostenibles, y para ello hemos creído esencial contar con un programa de actuación consensuado, transversal y realista”.
Entre las mejoras que se van a poner en marcha en La Laguna, una de las previstas será la renovación de al menos seis de los vehículos que actualmente prestan servicio en el trazado urbano, un proceso que se irá desarrollando a medida que los proveedores tengan disponibilidad de vehículos y para el que ya se ha previsto una dotación económica de más de 3 millones de euros, “un nuevo paso para avanzar hacia una red urbana mucho más sostenible y eficiente”.
Reducir el uso del coche
El Área ya había habilitado una partida de 1.139.000 euros en los últimos presupuestos, prorrogados temporalmente, y que se aumentarán en las nuevas cuentas de este 2023 para adquirir los dos primeros vehículos no contaminantes e instalar las conexiones de recarga específicas e instalaciones complementarias necesarias.
Entre las otras acciones desarrolladas en el ámbito del transporte público urbano, recuerda el edil, “hemos realizado un estudio de las más de 600 paradas de guaguas del municipio, que incluye la idoneidad de la localización, la adaptación al volumen de usuarios por zonas, existencia y estado de las marquesinas, bancos o barras de apoyo isquiático y las necesidades en accesibilidad e iluminación, aspectos que estamos contrastando con las aportaciones de la ciudadanía para diseñar un plan de actuación integral”.
Este trabajo comunitario se ha desarrollado a través de la Consulta de Movilidad. Líneas y paradas de guaguas de La Laguna, un estudio desarrollado entre los meses de abril y octubre del año pasado, en el que participaron más de 1.100 personas y que “nos permite contar con una importante una base de datos para analizar la situación de cada distrito, de los grupos de edad y también de otras necesidades específicas, como personas mayores, con discapacidad, en situación de desempleo, de la comunidad educativa, etc.”.
Atendiendo a los resultados obtenidos en este estudio, los aspectos a mejorar con más urgencia respecto al servicio de guaguas de La Laguna están relacionados con los horarios, la frecuencia, la eficiencia de los recorridos y la puntualidad, además de la renovación de la flota para que todas sean accesibles y ecológicas. Las marquesinas, la información en paneles o pantallas y la iluminación son los aspectos que más preocupan en el caso de las paradas.
PMUS, ZBE y carriles bici
Asimismo, el Área está ultimando la redacción del Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), está desarrollando el proceso de participación comunitaria en Camino la Villa, San Honorato y el Casco, barrios para los que ya cuenta con los proyectos piloto de Zonas de Bajas Emisiones, al mismo tiempo que está avanzando en los proyectos de la red de carriles bici local y en la puesta en marcha del primer servicio público de alquiler de bicis eléctricas.
Cabe recordar que La Laguna, tal y como establece la Ley de Bases de Régimen Local para los municipios con una población de más de 50.000 habitantes, tiene las competencias en el servicio público de transporte urbano de viajeros. Desde octubre de 2019, se presta mediante encargo a la empresa insular Titsa, con 14 vehículos de los que 4 son propiedad del Ayuntamiento.