En este corto período de tiempo de Gobierno del equipo de Rajoy, se nos van mostrado las caras más duras de la derecha a través de las propuestas de sus ministros que a diario no dejan de sorprendernos con medidas cada vez más injustas para el común de la ciudadanía.
Así, en un descarado ejercicio de privatización de la Justicia, el ministro Gallardón propone (lo que equivale a impone) que sean los Notarios quienes celebren bodas y lleven a cabo divorcios para aliviar los juzgados y tribunales.
Según señala el Consejo General del Poder Judicial y el Instituto Nacional de Estadística, en 2010, la Administración de Justicia conoció 9,3 millones de asuntos, de los cuales 169.020 fueron bodas y 70.932 divorcios. Eso supone que los enlaces supusieron tan sólo un 1,8% de la carga de los juzgados y los desenlaces menos aún, un 0,72%. En total, un 2,5%. O lo que es igual: Una minucia.
Pero esa minucia, privatizada, puede llegar a suponer para los Notarios unos ingresos de más de 72 millones de euros al año (calculando unos aranceles de 300 euros por boda o divorcio, lo que evidentemente podrá variar en cada caso porque a efectos de minutar dichos aranceles, se tendrá muy en cuenta el valor del patrimonio a dividir en el caso de los divorcios)
En contraposición a tan injusta medida, que es solo un ejemplo de lo mucho que ha de venir, nos encontramos con la desesperada situación de una mayoría de ciudadanos y ciudadanas que han perdido sus empleos, y en consecuencia, se han visto obligados a dejar de pagar las hipotecas de sus viviendas. (En el ultimo trimestre de 2011, 400 familias, solo en Canarias, fueron desahuciadas.)
Hace unos días, la Defensora del Pueblo en funciones, presentó un Informe específico titulado «Crisis económica y deudores hipotecarios: propuestas y actuaciones», en el que propone expresamente que el Gobierno impulse un Acuerdo político asumido con el sector bancario que incluya una moratoria en el pago de las hipotecas y la flexibilización de cuotas. Se recomienda así mismo que se introduzca de una vez por todas la dación en pago.
Dicho Informe señala que nos encontramos ante situaciones excepcionales que merecen respuestas excepcionales, sin embargo no he escuchado hasta ahora al Ministro de Economía hablar de este asunto ni he leído que se proponga seguir las recomendaciones de la Defensora del Pueblo, adoptando medidas a favor de las personas que sufren los desahucios.
Cuenta la historia que en Roma, los plebeyos perdieron la paciencia. Dejaron la ciudad de Roma y levantaron un campamento en el Monte Sagrado. Desde allí, amenazaron con fundar una nueva ciudad donde todos los hombres tuvieran los mismos derechos, garantías y obligaciones.
¿A qué estamos esperando?