Abdullah: “Los cambios de Titsa en Tíncer vuelven a demostrar que al Ayuntamiento no le importa el Suroeste”

 

Roberto Abdullah, vocal de Sí se puede en el Distrito Suroeste de Santa Cruz de Tenerife, dijo hoy que la eliminación de tres paradas en la línea 217 de Titsa, que usan los vecinos de Tíncer para comunicarse con el resto del municipio, son una muestra más de que “al Ayuntamiento le importan un pimiento los problemas del Suroeste de Santa Cruz”, al que sigue ninguneando pese a los graves problemas sociales, económicos, de servicios y de comunicación que padece.

“Lo único que hace el Ayuntamiento es callar ante la última cacicada de Titsa, que ha eliminado tres paradas precisamente en el barrio de Tíncer, lo que dificulta enormemente la comunicación de los residentes con el resto del municipio”, afirmó Abdullah. Este problema se viene a sumar a los ya existentes en materia de transportes, como los que padecen las personas que tienen que trasladarse a los servicios de urgencias de Ofra, pese a contar en el distrito con tres centros de atención primaria. Algunas, como las que viven en El Humilladero, tienen que coger una guagua y el tranvía.

Según el vocal de Sí se puede, los agravios que sufre el Suroeste son consecuencia del olvido y la falta de voluntad política por parte de los gobernantes locales: “Vemos cómo se asfaltan las calles y se proponen proyectos millonarios para otras zonas del municipio mientras aquí los vecinos seguimos con calles de tierra, como hace cien años, en las que no pueden entrar ni las ambulancias”.

Abdullah cree que la situación actual es consecuencia de la nula previsión por parte del Ayuntamiento a la hora de planificar el desarrollo de esta amplia zona del municipio. “Se han creado ciudades artificiales y luego las han dejado de la mano de Dios –afirmó–, con parques totalmente abandonados, calles sucias, instalaciones deportivas desastrosas; no hay un plan de juventud en condiciones y los vecinos seguimos esperando a que se abra la ludoteca de Añaza y la guardería de El Sobradillo. ¿Cuánto tiempo más deberemos seguir esperando?”, se pregunta el portavoz de Sí se puede.

A todo ello se suma una realidad social y económica sumamente grave para la que no se cuenta con el apoyo del consistorio. “Los proyectos sociales que estaban en marcha en Añaza se acaban, pero es que en otros núcleos, como la zona alta de El Sobradillo o La Gallega, nunca han existido”, afirmó Abdullah. Frente a esta situación, los vecinos ven cómo se le permite a Emmasa cortar un servicio tan esencial como el agua y cómo el Ayuntamiento ha gastado más de 200.000 euros en pagar el alquiler de unos locales vacíos y cerrados que deberían estar ocupados por la Unidad de Trabajo Social de Los Majuelos.

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