Sí se puede exige la dimisión de Rajoy por la desintegración de un partido y un gobierno carcomidos por la corrupción

Sí se puede exige la dimisión de Rajoy como un acto de responsabilidad ante la desintegración de un partido, el PP, y un gobierno, el español, carcomidos por la corrupción. “La dimisión de Soria no puede sustituir que se den las explicaciones necesarias a la ciudadanía y que se facilite que caiga sobre el ahora exministro todo el peso de la ley”, asegura el portavoz de la organización ecosocialista canaria, Pablo Jerez.

“La impunidad, la opacidad, el abuso de poder, la utilización de las instituciones públicas para el enriquecimiento propio o de empresas asociadas deben perseguirse y castigarse de manera ejemplar”, subraya el portavoz.

En paralelo a la acción de la justicia, las responsabilidades políticas no pueden eludirse y van más allá de las actuaciones personales de Soria: “la rendición de cuentas ante la ciudadanía no consiste en escenificar explicaciones peregrinas sustentadas en mentiras para la televisión; Rajoy debe dar explicaciones en la sede parlamentaria y renunciar a encabezar un gobierno que solo está legitimado para pasar el testigo”, afirma Jerez.

“El exministro ha sido uno de los pilares del equipo de Rajoy en el gobierno central, ejecutor de su nefasta política energética, uno de los sectores económicos más afectados por el entramado de intereses político-empresariales, y el presidente en funciones no puede esconderse detrás de la dimisión de uno de sus ministros de confianza para dar por cumplidas todas las responsabilidades políticas”, asegura el portavoz de la formación ecosocialista canaria.

A juicio de Sí se puede, la renuncia de José Manuel Soria a continuar en el gobierno en funciones no evitará la indignación de la ciudadanía, que crece con las noticias que cada día evidencian la podredumbre del sistema político estimulada por el mal gobierno del Partido Popular, lo que lo deslegitima para ofrecerse a participar en cualquier fórmula de gobierno.

Soria no ha podido ocultar en los últimos días el saldo negativo que deja, al combinar con total descaro sus responsabilidades políticas al frente del gobierno municipal de Las Palmas de Gran Canaria, en el ejecutivo autonómico de Canarias, y en el ministerio de Industria, Energía y Turismo del gobierno central con los intereses empresariales corruptos, propios y ajenos.

El legado de Soria deja tras de sí, entre otras actuaciones, la estela del intento de prospecciones petrolíferas en las aguas de Canarias, la culminación de la alianza entre la cúpula política del Estado español y las multinacionales eléctricas, y el denostado “impuesto al sol”, para impedir el derecho ciudadano a autogestionar el consumo energético con energías limpias y renovables. Todo esto mientras, en paralelo, la familia del exministro ampliaba el campo de acción de una empresa dedicada al sector exportador hortofrutículo tradicional a negocios relacionados con el petróleo.