Sí se puede rechaza que los partidos políticos intervengan en política municipal desde sus oficinas en el Parlamento de Canarias

 

Sí se puede rechaza que los partidos políticos intervengan en la política municipal desde las oficinas de sus grupos en el Parlamento de Canarias. Vanesa Martín, portavoz de la organización ecosocialista, asegura que “las intrigas en sede parlamentaria atentan contra la democracia y la autonomía municipal y son una muestra más de la vieja política que pronto ha de desaparecer”:

Martín profundiza en la denuncia de la organización ecosocialista al indicar que “los partidos del régimen, CC, PP y PSOE, utilizan las oficinas de sus grupos parlamentarios para maquinar las componendas que sostienen sus rocambolescos y débiles pactos de gobierno en los municipios”.

Esta forma de funcionar, señala la portavoz de Sí se puede, es una expresión de la degeneración de unas organizaciones políticas que, en lugar de concentrarse en la labor parlamentaria de promoción de iniciativas legislativas para toda Canarias o de control al gobierno autonómico, “intervienen desde Santa Cruz de Tenerife en apuntalar un poder que los votos no le garantizaron en las urnas”.

Pero, además, al intervenir de esta manera en el mantenimiento de los acuerdos de gobierno municipales, “atentan contra la autonomía municipal, al someter los gobiernos de los pueblos y ciudades de Canarias a acuerdos que nada tienen que ver con los intereses de la ciudadanía”.

Por el contrario, Sí se puede defiende el desarrollo de prácticas municipalistas, basadas en que las candidaturas y los cargos electos estén formadas y controladas directamente por la ciudadanía, ya que “entendemos que la democracia empieza por lo próximo, por la política local, y por acercar y abrir las instituciones a todas las personas residentes en los municipios”, aseguró Martín.

La portavoz de Sí se puede puso como ejemplo de esta “práctica decadente, que somete la política municipal a la jerarquía férrea y piramidal de los partidos”, la forma en que CC y PSOE han ventilado la crisis provocada en torno al concejal Javier Abreu en la ciudad tinerfeña de La Laguna, que ha sido gestada y gestionada desde la sede parlamentaria de ambos partidos en la cámara legislativa autonómica.

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