Uno tras otro, los puntos del Orden del Día fueron sometidos a debate pero, en todo momento, las posturas de los grupos políticos integrantes del pacto de Gobierno, CC-PNC y PSOE, demostraron con claridad meridiana cual es el talante y el tipo de política que van a imponer en el Consistorio tacorontero.
Así, el grupo de gobierno municipal comenzó haciendo oídos sordos a la iniciativa, presentada por Alternativa Sí se puede y Partido Popular, de que en lo sucesivo los Plenos se celebren en horario de tarde, a fin de facilitar la asistencia a los mismos del mayor número posible de ciudadanos y ciudadanas. No podemos por menos que preguntarnos si esto es lo que entiende el actual grupo gobernante por transparencia y participación. Muy triste, por no emplear otro calificativo, es ver cómo el grupo socialista que, junto con el resto de la oposición, reivindicaba esta demanda en anteriores mandatos, ahora pierda interés por lo que hasta hace poco consideraba una importante medida democrática.
Pero el Pleno reservaba otras desagradables sorpresas. Entre ellas, las propuestas del Alcalde a la hora de fijar el número y los sueldos de ediles con dedicación exclusiva. En este punto, y frente a la alarmante situación socioeconómica actual, con la peor tasa de paro conocida en la etapa democrática en nuestro municipio, con sueldos en gran parte precarios, con recortes salariales a los empleados públicos a lo largo del último año, los sueldos que se asignan a los cargos electos liberados resultan, sencillamente, escandalosos. Las cifras son harto elocuentes si las comparamos con las correspondientes al inicio del mandato precedente.
Así, al primer teniente de Alcalde, cargo que ostenta el socialista Carlos Medina Dorta, se le asigna un sueldo de 49.000 € anuales, frente a los 40.167,82 € que percibía su antecesor, el nacionalista Fernando Meneses.
Por otra parte, el segundo teniente de Alcalde, Ignacio Álvarez Pérez, también percibirá 49.000 € al año, frente a los 46.518,78 que cobraba su antecesor en el cargo, Andrés Ramos (PNC).
El citado Andrés Ramos pasa ahora a cobrar 44.000 anuales y los restantes 5 concejales liberados se embolsarán 35.000 €, frente a los 33.867,54 € que cobraban los ediles con menor sueldo en 2007.
Igualmente, las subidas en concepto de grupos políticos (de 210 a 250 €), dietas del Presidente de la Junta de Gobierno (de 220 a 280 €) y a los portavoces de los grupos municipales (de 145 a 150 €), fueron rechazadas de plano por los dos partidos de la oposición, pero recibieron el beneplácito de los concejalas y concejales nacionalistas y socialistas.
Tampoco hubo la más minima receptividad por parte de CC-PNC y PSOE a la hora de permitir participar a los ediles de la oposición en la veintena de órganos colegiados en los que tiene representación el Ayuntamiento de Tacoronte, como reclamaron Sí se puede y Partido Popular. Una reivindicación que también compartían los socialistas hasta fechas recientes, cuando formaban parte de la oposición en anteriores mandatos, y que ahora parece sumida en el olvido.
Asimismo, las delegaciones de varias competencias del Pleno a la Junta de Gobierno Local, en materias tan “jugosas” como, por ejemplo, la adquisición de bienes y derechos cuando su valor supere el 10% de los recursos ordinarios del presupuesto y, en todo caso, cuando se superior a tres millones de euros; las enajenaciones patrimoniales cuando su valor supere el 10% de los recursos ordinarios del presupuesto y no supere el 20; la concesión de bienes y servicios por menos de cinco años, siempre que su cuantía no exceda del 20% de los recurso ordinarios del presupuesto; así como la contratación de obras y suministros cuya duración exceda de un año o exijan créditos superiores a los consignados en el Presupuesto anual de la entidad y la aprobación de pliegos de condiciones generales a que deban sujetarse los contratos de la Corporación, fueron rechazadas por Sí se puede y PP por entender que esta delegación vacía de contenido las competencias plenarias en asuntos de esta importancia. Los votos a favor de CC-PNC y del PSOE, zanjaron la cuestión, que en consecuencia fue aprobada por mayoría simple.
En contra de las palabras pronunciadas por el nuevo Alcalde al comienzo del Pleno, mediante las que manifestó su voluntad de buscar acuerdos dialogados entre todas las fuerzas políticas con representación institucional, estas actitudes no pueden encontrar, de ninguna manera, el apoyo de los 8 concejales y concejalas de la oposición.
En resumen, un mal comienzo y peor noticia para el pueblo ¿Consenso? Así no.
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