Sí se puede reclama que la llamada momia de Erques sea devuelta a Tenerife. La organización ecosocialista recuerda su posición respecto al tratamiento de los restos arqueológicos de los pueblos a raíz de la noticia del traslado de la momia desde el Museo Nacional de Antropología (MNA) al Museo Arqueológico Nacional (MAN), ambos situados en Madrid.
El Senado ya aprobó en 2006 una moción –con el voto a favor de todos los grupos políticos, excepto el PSOE entonces en el gobierno–, por el que se establecía que el ejecutivo central debe “adoptar las medidas necesarias” para la devolución de la momia a Tenerife para que se sume a la colección de momias guanches del Museo Arqueológico insular. La reclamación de la devolución de la momia tiene una larga historia, puesto que ya fue planteada en 1976 por un acuerdo unánime del Cabildo de Tenerife.
Pablo Jerez, portavoz de Sí se puede, señala que “no es de recibo el argumento que ha esgrimido el Ministerio de Cultura según el cual la momia es un bien de dominio público de titularidad estatal, especialmente cuando la historia del deambular de los restos guanches demuestra que su presencia en los museos de Madrid es resultado del expolio”.
Igualmente, la organización ecosocialista rechaza el argumento que niega la devolución de la momia porque “rompe con la unidad de la colección del museo, ya que, por encima de ese criterio, está el derecho de un pueblo a conservar, conocer, estudiar y disfrutar su patrimonio histórico y cultural, además de un acuerdo del Senado de obligado cumplimiento”.
La momia citada es el cuerpo embalsamado de un varón adulto, de entre 35 y 40 años y de 1,60 metros de altura. Fue hallada en el barranco de Erques en 1776, cuando pasó a ser propiedad de la Real Biblioteca y posteriormente, por orden de Carlos III, trasladada al Real Gabinete de Historia Natural y desde ahí, al antiguo Museo Velasco en 1895.
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