AUP-Sí se puede se opone decididamente al trazado del anillo insular que afecta a San Juan de la Rambla

La organización ecosocialista exige al Gobierno de Canarias un cambio de proyecto, respetuoso con el medioambiente y que no condicione el desarrollo de la comarca Denuncia que las acciones previstas para el tramo desde el barranco de Los Palomos hasta Los Alenes constituyen una “amputación irreversible”

Asamblea Unificada del Pueblo (AUP)-Sí se puede se opone decididamente al trazado del anillo insular que afecta a San Juan de la Rambla, según las previsiones del Gobierno de Canarias, al que exige “que opte por un proyecto respetuoso con el medioambiente y que no condicione de forma irreversible el desarrollo socioeconómico de nuestro municipio y nuestra comarca”, asegura su portavoz en el Ayuntamiento, Juan Siverio.

A juicio de AUP-Sí se puede, el proyecto actual constituye una “amputación irreversible del área con mejor potencial tanto turístico como agrario de la zona”, por lo que reclama al Gobierno de Canarias, en primer lugar, que “conserve y proteja el Espacio Natural Protegido de Barranco de Ruiz y el Paisaje Protegido de Campeches, Tigaiga y Ruiz y su Zona Especial de Protección de las Aves (ZEPA), que lo ponga en valor y difunda su riqueza natural”, apunta Siverio.

La organización ecosocialista propone alternativas con menor impacto ambiental, paisajístico y económico y prepara alegaciones con el objetivo de convencer al Gobierno de Canarias para que reconduzca sus previsiones, que, en apenas un kilómetro, en el tramo que va desde Los Palomos hasta Los Alenes, contemplan la creación de dos túneles y varios viaductos sostenidos sobre columnas de más de 30 metros de altura. En este sentido, Siverio subraya que “los impactos son importantísimos, irreversibles y evitables en su totalidad, tal como demostramos en la alternativa que estamos preparando”.

Así, AUP-Sí se puede reclama al gobierno autonómico que retire la construcción de los viaductos proyectados y dé continuidad a los túneles con salidas en cualquier punto después del primer túnel de La Rambla en dirección a Santa Cruz donde el equipo técnico considere oportuno, de tal manera que la solución aportada cumpla tres condiciones: que resuelva el problema de seguridad del barrio de La Rambla; que conlleve el menor número de expropiaciones posible y que tenga el menor impacto ambiental posible. Igualmente, plantea una inversión para la carretera TF-5 que ponga en valor “las impresionantes vistas del risco y la costa a través de diferentes miradores y zonas de esparcimiento, donde también proponemos habilitar un carril bici y un paseo que dé a este espacio un uso deportivo, de disfrute, de ocio y salud al aire libre”, indica el concejal.

Estas medidas, que AUP-Sí se puede exige aplicar en las diferentes vías afectadas, deben ir asociadas también a una inversión del ejecutivo autonómico para “la promoción e inversión en el norte vaciado, dirigidas a impulsar el turismo de naturaleza, actividades deportivas, gastronomía, agroturismo, bienestar, energías renovables, depuración natural y movilidad sostenible, un conjunto de actuaciones que colocarán al norte de Tenerife en la visión ecosostenible que reclama la ciudadanía del planeta a estas alturas del siglo XXI, las únicas acciones que garantizarán el mantenimiento o el retorno de las generaciones más jóvenes, dispuestas a experimentar y sostener un modelo de desarrollo alternativo generador de empleo de calidad con un alto valor sociocultural y ambiental”.

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