Violentos. Paco Déniz.
El guineo de Rubalcaba sobre los violentos está resultando nauseabundo. Él sabe que la violencia política polariza a la sociedad y cuando tilda a los disidentes de violentos pretende colocarlos en el punto de mira de una supuesta mayoría ciudadana decente y pacífica que respeta el orden constitucional “que todos nos hemos dado”.